LUNES 12 DE
SEPTIEMBRE DE 1870
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Mapa de Roma. Clica para aumentar. |

Yo di ayer una
vuelta en coche con el Teniente Derely, saliendo de Puerta del Pópolo y
entrando por Puerta de San Juan Laterano. La puerta Salara estaba cerrada y
llenada de tierra por dentro. Delante de la Puerta Pía, la que quedó del todo
abierta, se estaban concluyendo los terraplenes y las barricadas. Puertas San
Lorenzo y Puerta Maggiore estaba ya cerradas y llenadas de tierra.

El Subteniente
Kervin tenía orden de no abandonar ese punto más que cuando estuviesen ya allí
los italianos: y habiendo él cumplido la orden, se encontró rodeado por 15.000
hombres; se defendió por un poco de tiempo, pero al fin tuvo que rendirse, y
creo que quedaron heridos algunos zuavos. Esta noticia nos dio mucha lástima y
ya empezamos a temer que le sucediese lo mismo también a Charette, el que tenía
orden de esperar que llegasen los italianos y sólo entonces retirarse sin hacer
resistencia.
Empezaron
luego a llegar noticas de Civitá Castellana, donde había la quinta Compañía del
cuarto Batallón de Zuavos (Capitán de Resimont) y la Compañía de disciplina,
mandada por el Capitán Rufini, de línea indígena.
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Civitá Castellana |
Los telégrafos de Roma a Civitá Castellana ya
estaban cortados; de suerte que nada de fijo pudimos saber entonces. Los
italianos, según oímos después de muchos días, bombardearon el pequeño fuerte
de Civitá Castellana por más de una hora y le rodearon con 20.000 hombres a lo
menos. El comandante del fuerte resistió todo lo que pudo, causando bastantes
pérdidas al enemigo, pero a lo último viendo que la población iba a ser
destruida y sin provecho, y después, sabiendo positivamente que de Roma nadie
iría a ayudarle y que toda resistencia sería inútil, se decidió a capitular por
la tarde. La Compañía de Zuavos y la otra salieron del fuerte y entregaron las
armas según todas las formalidades acostumbradas. Los zuavos tuvieron algunos
hombres heridos y creo que algún muerto también. Muchos pensamos en Civitá
Castellana, pues en Roma se contaban toda suerte de noticias, y no se podía
saber la verdad.
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